La dinámica principal tras la exposición teórica invitaba a los asistentes a esta sesión virtual a planificar un año de sus vidas en el que las limitaciones económicas no suponían un impedimento, y al final del cual tenían que reportar en una cena con la facilitadora en Estocolmo.
Tras esto, es sugirió otra propuesta práctica que consistió en diseñar un prototipo para una de las propuestas de negocio aportadas por los asistentes. La participación fue satisfactoria y muchos de los asistentes se cuentan ya entre las filas de emprendedores asesorados desde el Centro de Innovación Territorial Altoaragón.